miércoles, 17 de febrero de 2010

Invitación

Reviéntate y tradúcete.

Aliméntame de mandíbulas marcadas,

de alientos de sal histérica,

de arañazos desconsiderados.

No esperes, porque no te espero.

Seamos instrumentos, aprovechables.

1 comentario:

  1. Explotaré jadeante con esa magia de tu lengua, tomará mi piel otro color en el repliegue sudoroso tocándome al imitarte, mis dientes harán cicatrices en tus hombros, y en el resto de ti, que busca a tientas ahora mi boca abierta, cegada, desesperada al sol, dibujándose los labios una y otra vez con los dedos, incrustaré mis uñas a tu deseo.
    Y no, no te espero, ya he acabado, solo me queda quitar el exceso de sudor a los pies de una ducha, tan nutritiva espero, como tu intervención...

    Anna, SF

    ResponderEliminar